Cuevas de Cristal . Molinos (Teruel) |
Tenia unos 10 años cuando visité por primera vez las Cuevas de Molinos (Teruel) cuyo descubrimiento en el año 1961, había causado una gran expectación en el Bajo Aragón y el Maestrazgo. En el año 2011 se celebró el 50 aniversario de su descubrimiento y Molinos organizó unas jornadas en las que participaron sus descubridores e incluso se estampó un sello conmemorativo.
Cuevas de Cristal |
En estas primeras cuevas, llamadas Las Beticambras, se encontraron los restos del "Hombre de Molinos", el humano más antiguo de Aragón. Tenían impresionantes estalactitas de un inmaculado color blanco que acabaron negras por el humo de los carburos y, según me comentaron hace un tiempo, se cerraron y todavía permanecen inaccesibles al público. Al parecer toda la colina está comunicada por galerías, aunque solamente es accesible una pequeña parte de ellas.
Las que se visitan actualmente son las cuevas de Las Graderas ya con luces interiores y un recorrido que facilita la visita de los grupos.
Cuando a finales de diciembre de 2012 volvimos de Borneo, después de visitar las impresionantes y enormes cuevas del Parque Nacional de Mulu, (se consideran las mas grandes del mundo) fuimos a ver las cuevas de Cristal de Molinos. Durante el viaje de Borneo no pude por menos que compararlas y, como la imaginación es caprichosa, siempre salían ganando las cuevas de Molinos.
Formaciones en las Cuevas de Cristal |
Pero la originalidad de las cuevas de Molinos no está en su tamaño (bien es sabido que el tamaño no importa). Lo que hace que las Cuevas de Cristal sean diferentes es el color claro de las formaciones y sobre todo la forma de las estalactitas, técnicamente estalactitas excéntricas de crecimiento vertical, (que pena no tener mas conocimientos de geología para entender esta maravilla), es decir originales formas en las que pequeñas estalactitas suben hacia arriba colgadas de las estalactitas que bajan del techo de la cueva.
Después de visitar las cuevas nos paseamos por el pueblo, entramos en la iglesia de Nuestra Señora de la Nieves de estilo gótico levantino construida en piedra y ladrillo con una antiquísima pila bautismal del siglo III, recorrimos calles con casas solariegas y nos asomamos al puente para ver el río Guadalopillo que cruza el pueblo formando un profundo barranco con un salto de agua de 30 metros. Subimos hasta la Torre del reloj en la parte mas alta del pueblo con una amplia vista. Y para completar el día una estupenda comida en el “Hostal de la Villa” un restaurante en el centro en un bonito edificio de piedra.
Un día agradable que mereció la pena y nos permitió disfrutar de un nueva modalidad de viaje, el “geoturismo” .
Como una imagen vale mas que mil palabra, os dejamos este vídeo de TV Aragón para que disfrutéis de Molinos y os paseéis por las cuevas.