Sicilia. Agrigento. Valle de los Templos. Templo de la Concordia |
Agrigento y el Valle de los Templos
Agrigento. B&B “La Doce Vita |
El encargado nos enseña la amplia habitación con terraza a la calle, decorada al estilo palacio de "Madame Pompadour" sin que le falte detalle. Kitsch total! Me encanta porque no esperaba encontrarme con un lugar tan sorprendente!. La foto da una idea.
Dejamos las cosas y salimos a dar una vuelta por la calle Athenea, la arteria principal y más comercial de Agrigento.
Nos sentamos en la terraza del restaurante “Ambasicata de Sicilia” a comer al aire libre en un cálido día de otoño. Pedimos al azar y todos los platos están buenísimos: los mejillones en salsa de tomate, los raviolis de mero con salsa de pistacho y orégano, el mero en su salsa, el vino blanco siciliano...
Sabores de Sicilia
La terraza, el sol, el mar al fondo, una larga comida saboreando los sabores sicilianos... Un lujo, un placer y desde luego un lugar para recomendar.
Cuando terminamos de comer las tiendas están cerradas, paseamos por las calles vacias, entramos en iglesias y en la Plaza Escriva de Balaguer encontramos la casa en la que Luigi Pirandello, que nació y vivió en Agrigento, se inspiro para una de sus obras.
Concierto Iglesia de la Inmaculada. Agrigento |
Cuando acaba, subimos y subimos hasta la parte alta del pueblo, donde se encuentra la catedral normanda de San Gerlando, uno de los monumentos históricos más importantes de Agrigento. Está cerrada por obras (y parece que van para largo) y nos quedamos con las ganas de experimentar el fenómeno acústico que hay dentro de la iglesi
Catedral normanda de San Gerlando. Agrigento |
Es un barrio bastante deteriorado, con casas en estado calamitoso y un ambiente que aconseja no dar muchas vueltas.
Volvemos a la calle principal. Es sábado y los bares y restaurantes están llenos. Nos da la impresión de que gran parte de Agrigento está en un estado deplorable de conservación. Leemos que es una de las ciudades más pobres de Italia, con problemas con la mafia y el crimen organizado y lo entendemos un poco más.
Nos comemos una pizza en el restaurante Manhathan, otro lugar que tambien recomendamos, y nos dedicamos a observar a la gente que charla a la puerta de los bares. La mayoría de ellos, sean mayores o jóvenes, bebe vino en copa de cristal, apenas vemos gente tomando cerveza o refrescos. A Luis, que le encanta el vino, comenta que este si que es un pueblo con cultura y que seguramente las campañas del movimiento slow food, que surgió en Italia hace unos 20 años, en defensa de los productos propios y cercanos, han propiciado esta buena tradición.
Monasterio del Sto Espiritu. Agrigento. |
Olivo centenario. Agrigento. Sicilia |
Vamos caminando hasta el Valle de los Templos, que esta a unos 3 kms cuesta abajo. Es Patrimonio de la Humanidad y representa el conjunto de templos griegos mejor conservado del mundo. La mayoría de ellos son del s. V antes de Cristo y se encuentran en una colina, un lugar defensivo natural desde el que se observa el valle con el río y Agrigento asentado en la ladera de otra colina.
Al llegar nos encontramos con la sorpresa de que al ser domingo la entrada es “free”. (creemos entender que es gratis todos los domingos de diciembre). Nos ahorramos 10 €.
Templo de Hera. Valle de los Templos. Agrigento. Sicilia |
Templo de Hera. Valle de los Templos. Agrigento. Sicilia |
Templo de la Concordia. Valle de los Templos. Sicilia |
Templo de Heracles. Valle de los Templos. Agrigento. Sicilia |
Paseamos por las ruinas del Templo de Zeus / Júpiter Olímpico, que al parecer tenia unas medidas gigantescas, pero no se llegó a concluir. Al lado se ha reconstruido un "telamón" o figura antropomorfa que adornaba la parte alta del templo. Su tamaño nos da una idea de las gigantescas medidas del templo; el original se conserva en el Museo Arqueológico.
Templo de Castor y Pólux. Sicilia |
Por suerte estamos en diciembre y no hace mucho calor. Me imagino visitar estos templos en el mes de agosto y pienso que tiene que ser un verdadero suplicio.
Salimos por la Puerta Áurea y esperamos el autobús para subir al pueblo, no nos apetece caminar tres kms cuesta arriba. Pasa el autobús y no nos deja entrar por no llevar el billete que se compra en la tienda de enfrente, pasa el segundo autobús y no para porque no le hacemos señas. Por fin a la tercera montamos y en 5 minutos estamos en el centro del pueblo.
Más sabores sicilianos
Los restaurantes cierran de 15 a 17 h y no encontramos ninguno abierto a excepción del “Ambasciata de Sicilia”, comemos una rica pasta con sepia, jamón y calabacín y unas sardinas rellenas que están buenísimas y de nuevo disfrutamos de estos sabrosos sabores de Sicilia, demostrándonos que viajar con los sentidos tiene todo el sentido del mundo.
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