viernes, 20 de julio de 2012

Portugal. El barrio de Belém de Lisboa


Torre de Belém
Torre de Belém
¿Que bonito suena el portugués! Me gusta escucharlo y me resulta agradable entenderlo. En las islas Azores suena diferente, mas cerrado, pero igualmente melodioso.
Viajamos a la isla de San Miguel en las Azores después de pasar unos días en Lisboa. Desde el centro nos acercamos con el tranvia nº 15 hasta el barrio de Belém, en la desembocadura del río Tajo, dónde se encuentran dos joyas de la arquitectura manuelina: la Torre de Belém y el monasterio de los Jerónimos, ambos Patrimonio de la Humanidad.
Mosteiro dos Jerónimos
El estilo manuelino se desarrolló en Portugal durante el reinado de Manuel I (1495-1521), en una época floreciente de la economía portuguesa. Es una variación arquitectónica portuguesa del estilo del gótico tardío y del renacimiento con la incorporación de elementos mudéjares.
Parece que la mayoría de los turistas que visitan Lisboa se han concentrado en 
El Monasterio de los Jerónimos o Mosteiro dos Jerónimos (siglo XVI) construido para celebrar el regreso de la India de Vasco de Gama. La tumba de este descubridor ocupa un lugar importante en el interior de la iglesia. Visto desde cerca el Monasterio de los Jerónimos, es impresionante, no es baladí que sea uno de los edificios más importantes de Lisboa y de Portugal.
Detalle de la portada
Es un edificio muy rico en ornamentación en el que es un placer pararse a contemplar joyas como los portales de la iglesia en los que abundan las figuras fácilmente identificadas gracias a los paneles explicativos. El interior de la iglesia es una nave única y en ella se encuentran enterrados reyes e infantes de Portugal y personajes ilustres como el poeta Luís de Camões y el escritor Fernando Pessoa.
Cerca del monasterio, a la orilla del Tajo se construyó el Monumento a los Descubrimientos (1960) para conmemorar el quinientos aniversario del infante Henrique el Navegante, descubridor de  Madeira, Las Azores y Cabo Verde.
Monumento a los Descubrimientos

rinoceronte
No lejos de allí en la desembocadura del Tajo se encuentra la Torre de Belém, (1515 a 1519) construida para la defensa de la ciudad, aunque posteriormente se convirtió en centro aduanero y faro.
La torre es un edificio no especialmente alto, armonioso, de cinco pisos y termina en una terraza. Las plantas se comunican por una estrecha escalera de caracol por la que suben y bajan los numerosos visitantes.
En la fachada oeste de la Torre hay una gárgola  de un rinoceronte, recuerdo del primer rinoceronte que llego a Portugal de la India en 1513.
Desde La Torre de Belém

Desde la Torre de Belém




2 comentarios:

Beltran dijo...

Me encanta Lisboa :) Unas fotos muy bonitas! saludos

Luis Mur dijo...

Saludos Meritxell. Gracias por enlazar nuestro blog, nos alegra mucho que te guste y vamos a ir siguiendo también el vuestro.
Felices viajes.

Luis