Carreteras islandesas |
Volvemos hacia Skaftafell, el Parque Nacional del sur de Vatnajökull, a ver la famosa cascada Svartifoss con sus bloques de basalto y pasear por el sendero que sube hasta la lengua del glaciar.
Un paseo de unos 2,5 km hasta la colina desde la que se ve una de las lenguas del glaciar. El hielo, manchado por las piedras y el barro que trae el viento, está oscuro y de vez en cuando se oye el quejido del hielo al resquebrajarse.
Lengua del glaciar |
Es un recorrido agradable y la belleza del paisaje compensa la lluvia que cae a ratos. Pienso que me encantaría entrar y pasear por las montañas de hielo de este glaciar que me atrae y provoca miedo al mismo tiempo. Desde el Centro de Información del Parque se organizan todo tipo de actividades en el glaciar, pero de momento me voy a conformar con ver alguna imagen de los intrépidos que realizan recorridos por Skaftafell.
Sendero |
Svartifoss |
Pasamos de nuevo por la laguna de Jökulsárlón. Llueve, hace frío y se ve diferente. La corriente del mar empuja los bloques de hielo con tal fuerza que se mueven a toda velocidad, chocando unos con otros.
Preparamos cena en el albergue y tomamos una cerveza viendo un anochecer que nunca llega.
Después de unos días buenos hoy ha amanecido con lluvia, suave y fresca de las que casi no se nota, pero que cala.
Vamos a Höfn a unos 50 km. Desde el coche vemos el puerto y como la lluvia arrecia nos metemos en las piscinas que vemos a la entrada. Buena idea, un placer ir y venir por las piscinas de diferentes temperaturas, una de 29º, otra de 35º por los toboganes y las saunas.
Langosta de Holfn |
Vamos a comer a un restaurante lleno de lugareños que comen el menú: sopa y ensaladas o hamburguesas. Pedimos carne de cordero y bacalao y tenemos que esperar mas de una hora, y además no es nada especial, cometemos el error de no aplicar eso de “allá donde fueres haz lo que vieres”.
Compramos comida en el supermercado NETTO, sobretodo salmón islandés con eneldo que es buenísimo (en Höfn no hay BONUS, mas barato y el salmón muy bueno).
Las cervezas las compramos en la tienda de la cadena Vinbuddin, la única con licencia. En Islandia las bebidas con alcohol se venden en estas tiendas que abren unas horas cada día (tienen horarios peculiares). En los supermercados se puede comprar cerveza sin alcohol, que es muy buena y no especialmente cara ( aunque bastante más que en España).
Seguimos viaje hasta el albergue de Berunes, uno de los albergues de HI mejor valorados de Islandia. Es una antigua granja que durante varias generaciones ha sido explotada por la misma familia. La habitación es algo pequeña pero desde el salón comunitario se puede disfrutar de una preciosa vista del paisaje verde con el mar al fondo.
Puerto pesquero |
En Breiddalsvik, otro de los pueblos de nombre impronunciable, nos paramos en la casa del pueblo a ver el museo de los minerales. Lo llevan unos geólogos que nos cuentan que han estado en Aragón, un paraíso para los amantes de las piedras y nos enseñan el aragonito. Viven en la planta alta del museo y desde allí, a través de internet, venden y envían piedras islandesas a todo el mundo. Nos las enseñan y son realmente bonitas.
El día es frío y no ha parado de llover pero me sigue encantando este paisaje de mar con las montañas nevadas silueteando los pueblos.
Llegamos pronto a Eskifjördur, en el fiordo de Reydarfjördur, a una gueshouse bastante sencilla (79 €). Al poco Luis se da cuenta de que se ha dejado el cargador de la cámara en Berunes. Socorro!. Yo confundí el cargador de mi cámara, solamente puedo hacer alguna foto con el ipad. Sin la cámara de Luis estamos perdidos. Imposible comprar otro cargador. Así que vuelta para atrás, 110 km de carretera alrededor de los fiordos, curva va, curva viene hasta Berunes. Descansamos un poco hablando con la chica de la recepción que nos cuenta que conoce a la chica islandesa ganadora del concurso de Big Blog Exchange que se intercambio con Israel. Y revuelta va, revuelta viene, volvemos a Eskifjördur.
Por la mañana vamos por un camino de tierra hacia el interior del fiordo de Reydarfjördur. Solamente nos encontramos ovejas y caballos pastando en las laderas del camino. De vez en cuando alguna granja y largas cascadas que caen por las laderas de la montaña nevadas, al fondo el mar y el otro lado del fiordo.
Llueve y la niebla matiza los colores azules, verdes, negros y blancos que apenas brillan con la lluvia.
Salimos a la carretera circular 1, circunvalamos Egilsstadir en dirección al norte, a Borgarfjördur, el fiordo mas lejano. Subimos el puerto pero la niebla impide que podamos disfrutar del paisaje, por suerte cuando volvemos el día está despejado y comprobamos que es un paisaje realmente hermoso.
Vamos directamente al Alfa Café, un peculiar restaurante al lado de una fábrica de procesado de pescado. Comemos una sopa muy buena y al salir nos metemos a curiosear en la fábrica. Parece una empresa familiar, con varios chicos jóvenes limpiando el pescado. Nos cuentan que los lomos de bacalao se venden a España y las cabezas y raspas que vemos secándose en el exterior se venden a Nigeria para hacer sopa.
A unos 5 km del pueblo, en Hafnarhólmi anida una importante colonia de frailecillos y ahora si, tenemos suerte y podemos observar desde un mirador las rocas en la que anidan miles de frailecillos y gaviotas. Según indica un cartel informativo unos dos millones de parejas de frailecillos pasan el verano en este lugar. Los frailecillos viven todo el año en alta mar y en la época de cría van a la costa. Varios millones acuden a Islandia y según nos contaron, el día 15 de agosto, exactamente ese día, todos inician al mismo tiempo el vuelo y regresan al mar.
FRAILECILLOS
Seguimos el recorrido por los fiordos. La carretera que lleva a Seydisfjördur es un surco negro en un paisaje de nieve blanca. Nos paramos en las cascadas de Mulafoss y Gufufoss, a la orilla de la carretera y desde allí se divisa el pueblo al fondo. Una imagen de postal y ya desde lo alto intuimos que tienen razón los que afirman que Seydisfjördur es uno de los pueblos mas bonitos de Islandia.
Se está celebrando una fiesta del club deportivo en la plaza del pueblo y mucha gente lleva camisetas amarillas y negras, los colores del club. Hay animación infantil con suelta de globos amarillos y bocadillos de salchichas para todo el mundo.
El pueblo es realmente bonito, rodeado de montañas, con casas de madera alrededor del lago, muchas de ellas decoradas con preciosas esculturas de los artistas y artesanos que viven de forma permanente en el pueblo. Es una pena que no tengamos tiempo para navegar en kayak ya que este es uno de los lugares donde se puede hacer sin riesgo.
Durante el verano Seydisfjördur está comunicado por ferry con Dinamarca y las Islas Feröe.
Dormimos en el HI de Reydarfjördur, un lugar muy agradable, amplio, limpio y acogedor. Para mi el mejor alojamiento de los fiordos, un buen lugar para tomarlo como base.
Otros artículos sobre Islandia:
1.- Recién llegados a Islandia
2.- Por el sur de Islandia
3.- Círculo Dorado
4.- Vatnajökull el mayor glaciar de Islandia
10.- Reikiavik. Islandia
Llegamos pronto a Eskifjördur, en el fiordo de Reydarfjördur, a una gueshouse bastante sencilla (79 €). Al poco Luis se da cuenta de que se ha dejado el cargador de la cámara en Berunes. Socorro!. Yo confundí el cargador de mi cámara, solamente puedo hacer alguna foto con el ipad. Sin la cámara de Luis estamos perdidos. Imposible comprar otro cargador. Así que vuelta para atrás, 110 km de carretera alrededor de los fiordos, curva va, curva viene hasta Berunes. Descansamos un poco hablando con la chica de la recepción que nos cuenta que conoce a la chica islandesa ganadora del concurso de Big Blog Exchange que se intercambio con Israel. Y revuelta va, revuelta viene, volvemos a Eskifjördur.
OVEJAS ISLANDESAS
Por la mañana vamos por un camino de tierra hacia el interior del fiordo de Reydarfjördur. Solamente nos encontramos ovejas y caballos pastando en las laderas del camino. De vez en cuando alguna granja y largas cascadas que caen por las laderas de la montaña nevadas, al fondo el mar y el otro lado del fiordo.
Llueve y la niebla matiza los colores azules, verdes, negros y blancos que apenas brillan con la lluvia.
Vamos directamente al Alfa Café, un peculiar restaurante al lado de una fábrica de procesado de pescado. Comemos una sopa muy buena y al salir nos metemos a curiosear en la fábrica. Parece una empresa familiar, con varios chicos jóvenes limpiando el pescado. Nos cuentan que los lomos de bacalao se venden a España y las cabezas y raspas que vemos secándose en el exterior se venden a Nigeria para hacer sopa.
Bacalao seco |
Fábrica de pescado |
FRAILECILLOS
Seguimos el recorrido por los fiordos. La carretera que lleva a Seydisfjördur es un surco negro en un paisaje de nieve blanca. Nos paramos en las cascadas de Mulafoss y Gufufoss, a la orilla de la carretera y desde allí se divisa el pueblo al fondo. Una imagen de postal y ya desde lo alto intuimos que tienen razón los que afirman que Seydisfjördur es uno de los pueblos mas bonitos de Islandia.
Hacia Seydisfjördur |
El pueblo es realmente bonito, rodeado de montañas, con casas de madera alrededor del lago, muchas de ellas decoradas con preciosas esculturas de los artistas y artesanos que viven de forma permanente en el pueblo. Es una pena que no tengamos tiempo para navegar en kayak ya que este es uno de los lugares donde se puede hacer sin riesgo.
Durante el verano Seydisfjördur está comunicado por ferry con Dinamarca y las Islas Feröe.
Seydisfjördur |
Dormimos en el HI de Reydarfjördur, un lugar muy agradable, amplio, limpio y acogedor. Para mi el mejor alojamiento de los fiordos, un buen lugar para tomarlo como base.
Otros artículos sobre Islandia:
1.- Recién llegados a Islandia
2.- Por el sur de Islandia
3.- Círculo Dorado
4.- Vatnajökull el mayor glaciar de Islandia
10.- Reikiavik. Islandia
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