Parque Nacional Mulu. Borneo. Malasia

Cara de Lincoln. Cueva del ciervo. Mulu. Borneo. Malasia

Llegamos al Parque Nacional de Mulu en media hora de avioneta desde Miri. Para acceder a este parque, Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO, hay que ir por el aire o a través de un largo recorrido por el río Melinau, imposible llegar por tierra.
A las 10,30 de la mañana ya estamos en el parque. Dejamos las cosas y nos vamos a dar una vuelta por los alrededores del hotel, que está en el centro de la jungla. Se han construido senderos de madera de varios kilómetros elevados del suelo, que esta fangoso, para poder hacer  recorridos independientemente, para el resto, se necesita un guía. Nos acercamos hasta una cascada y pasamos la tarde escuchando los sonidos desconocidos de los animales de la jungla que no vemos.

El Jardín del Eden. Mulu. Malasia

El parque de Mulu es famoso por las espectaculares cuevas que se encuentran entre las mas grandes del mundo.

Parque Nacional Mulu. Borneo. Malasia

Por la mañana salimos a una excursión hacia " Garden of Eden", el jardín del Edén, que suena muy bien. Se encuentra a unas dos horas aprox del parque, se inicia por un camino de madera sobre el suelo, muy agradable. Llegamos a la "Cueva del Ciervo", según dice el cartel de la entrada, la mas larga del mundo. Desde el interior se puede ver una silueta que forman las rocas con la cara de Lincoln. Que bonito!. Llevamos unas linternas porque en el interior de la cueva cada vez se ve menos. Al poco nos tenemos que quitar las botas para ir por el río, no hay problema, nos ponemos las chancletas y " pa ya", pero la cosa no era tan sencilla, el río se hace más caudaloso y lo tenemos que vadear trepando por unas rocas resbaladizas, por la humedad de la cueva y los excrementos de los miles de murciélagos que viven en el interior, se calcula que son unos dos millones de murciélagos.

Es un infierno subir y bajar las rocas pero después de media hora de sufrimiento llegamos al final de la cueva. Bien se acabó!. Pero nos dice la guía, que era como la señorita Rotermeyer, que todavía falta media hora por la jungla hasta llegar a la famosa cascada del Jardín del Edén. Subimos por una senda enfangada y también muy resbaladiza (ya sin madera ni nada) y al final llegamos a la p. cascada que cuando llegue iba tan agobiada que no me quise ni bañar. Y después de comer, que ni comí y descansar un poco, la vuelta por el mismo camino. Sólo de pensarlo me ponía mala, además a Luis se le rompieron las chancletas del "carreful" y daba pena verlo caminar con la suela despegada. De nuevo más y más barro y excremento de murciélagos y una tremenda tensión para no caer por las resbaladizas rocas. Conclusión: si el Jardín del Edén es esto ahora entiendo porque Eva se comió la manzana. Aspecto positivo: mi pituitaria reconocerá para siempre el intenso olor de los excrementos de murciélago. Experiencia nueva: me picaron un par de sanguijuelas que me hicieron una sangría. Consejo: si haces la excursión llévate una buenas botas de agua con buena suela.

Frutos de palmera de aceite. Borneo. Malasia

Tocando la flauta con la nariz. Mulu. Borneo. Malasia

Salimos de la cueva pero todavía nos queda por ver la cueva de Lang más sencilla con estalactitas y estalagmitas con unas formas muy originales que parecen medusas.

El olor del durian. Malasia.

Ya era el atardecer y esperamos la salida de los miles de murciélagos de la cueva. Es impresionante ver salir a miles y miles de murciélagos que forman en el cielo larguísimos "gusanos" y círculos ordenados.

El siguiente día teníamos el cuerpo molido y lo tomamos con mas calma. Fuimos con un barco tipo canoa a visitar otra cuevas. Compartimos el barco con una ruidosa familia de chinos de Singapur. Visitamos la cueva de los Vientos enorme y grandiosa y la cueva de Aguas Claras por la que pasa un caudaloso río por el interior con una erosión tan fuerte que ha creado originales formas.
Son unas cuevas impactantes e inolvidables

En Borneo el durian es una fruta muy apreciada, pero huele tan mal que en muchos lugares prohíben su entrada.