domingo, 14 de julio de 2013

Reikiavik. Islandia

Escultura en Reikiavik
Que el calor de Zaragoza me tiene "aplataná" perdida y no tengo ganas de "ná". Todo el día con el abanico a cuestas intentando darle aire a este tremendo tiempo veraniego. Me prometí escribir una entrada cuando volviese de Islandia y todavía no he encontrado el momento para salir de mi languidez.Con lo bien que estaba yo con el forro polar!. Si hasta pusimos a ratos la calefacción del coche!. Fue llegar a Zaragoza y, al igual que el deshielo, las imágenes se fueron diluyendo en el bochorno y se convirtieron en nebulosas flotando en un mundo onírico.



Tras esta introducción y parapetada en el aire acondicionado me recreo/ refugio en el viaje a Islandia para volver a sentir el aire fresco.



El céntrico café París
Volamos con Lufthansa a Berlín, aprovechamos para dar una vuelta y volver a comer en el restaurante Zum Nussbaum cercano a la iglesia de San Nicolás.
Llegamos a las 2 de la madrugada al aeropuerto de Keflavik. Aunque hay luz suficiente no vamos a Reikiavik y preferimos pasar la noche en el pueblo. Cogemos un taxi que por 2000 coronas nos deja en Ravens GH ( 89 € con desayuno) que habíamos reservado. Es una casa muy agradable y con una decoración muy bonita.
Por la mañana nos sirve el desayuno Saga, la hermana del dueño que nos habla en inglés, cuando nos vamos nos dice que su padre es nicaragüense y que habla español, aunque al parecer le da vergüenza practicarlo.
Desde la estación de autobuses una furgoneta tarda unos 40 minutos (1,600 coronas, unos 10 €) en llegar a Reikiavik. Nos para en la calle, no lejos del Harpa, el recién estrenado auditorio y palacio de congresos que esta a la orilla del mar y caminando llegamos a AD Guesthouse (85 € sin desayuno, con cocina).
El día es cálido y soleado e invita a salir rápido a pasear por la ciudad.
Reikiavik es una ciudad sin apenas ruido, con calles solitarias y tranquilas hasta que se llega al centro a la plaza de Ingolfstorg decorada con coloridas sillas del Ikea y con nubes de vapor de las aguas térmicas que salen por los respiraderos.
 Hjartotorg (calle del corazón), Laugavegur (calle de las lavanderas) y  Skólavördustigur, las calles comerciales mas céntricas y conocidas de la ciudad.

El Parlamento 
El ayuntamiento de Reikiavik
El lago Tjörning

Llegamos hasta la plaza donde se encuentra Althingi,  el edificio del Parlamento construido en basalto, la piedra que predomina en Islandia. Me sorprendió por su tamaño pequeño y recogido. Islandia presume de ser la democracia parlamentaria mas antigua del mundo . Al lado del Parlamento se encuentra la catedral de Islandia, también pequeña y bastante sencilla que comunica directamente con el céntrico Lago Tjörning, lleno de patos, cisnes, gansos, gaviotas....y diferentes tipos de pájaros.  En uno de los laterales del lago destaca Radhus,  el moderno edificio del ayuntamiento, acristalado con vistas al lago. 


La empinada calle Skólavördustigur dibuja la silueta de Hallgrimskirkja  la iglesia Hallgrimus, de culto luterano al fondo. La iglesia es impactante, blanca, simétrica con escalones laterales que imitan las cascadas de Islandia y especialmente los basaltos de la cascada de Svartifoss.
Delante de la iglesia se encuentra la escultura de Leifur Eiriksson, el primer europeo que al parecer llego a America hacia el año 1000 unos 500 años antes de Cristóbal Colón. donada por Estados Unidos con motivo de los mil años del primer parlamento democrático del mundo.

Plano del puerto de Reikiavik

Solfar. El viajero solitario
Volvemos por la calle  Laugavegur y bajamos hasta la bahía de Faxafloi donde se encuentra  Solfar, el viajero solar, una escultura construida en acero inoxidable que hace un guiño al sol y que  recuerda al esqueleto de un barco vikingo varado a la orilla del Atlántico.
Un poco  mas adelante el edificio del Harpa, el auditorio- palacio de Congresos de nuevo juega con la luz y el sol (será porque gran parte del año Islandia se sume, en una prolongada oscuridad) y su diseño exterior lo forman hexágonos de cristal que crean un juego de luces que para nosotros resulto espectacular cuando, casi a las 12 de la noche, los últimos rayos del sol se proyectaban creando una intensa luz dorada.


Harpa

Con la cálida luz del atardecer, cuando ya el reloj ha marcado la medianoche y el día se resiste a desaparecer, volvemos al hotel a descansar porque al día siguiente cogeremos el coche para iniciar el viaje por Islandia.

Otros artículos sobre Islandia:
1.- Recién llegados a Islandia
2.- Por el sur de Islandia
3.- Círculo Dorado 
4.-  Vatnajökull el mayor glaciar de Islandia
10.- Reikiavik. Islandia

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